Hace 8 años | Por --424445-- a blogs.publico.es
Publicado hace 8 años por --424445-- a blogs.publico.es

En este duelo sin fin, en el que toda mujer y todo hombre de buena voluntad estamos inmersos por las víctimas de la violencia machista, al día siguiente de haber escrito Las diversas maneras de matar mujeres y niños otro infame ha asesinado a su mujer y a sus dos hijos. No sé si cuando termine este artículo ya habrá otras cifras que añadir a este horripilante recuento diario.

Comentarios

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Uffff...s'apropa una nova tempesta a Meneame!

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#1 pues si...porque algunos y algunas imbéciles creen que pensar que la LIVG es injusta te convierte en un misógino maltratador y machista. Y eso a muchos nos jode y lo expresamos. Aquí, por ejemplo

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#2 És evidentement que molts homes se senten discriminats per la llei.

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#4 #2 Les lleis no evitaran les morts. De fet poden augmentar-les si són percebudes com injustes.

L'educació sembla molt més útil.

Aquest debat sembla cada vegada més polaritzat. L'extremisme d'uns/es augmenta l'extremisme de l'altre pol. No esteu fent cap favor a les dones!

D'altra banda, no cal oblidar que la parella maltractada ha "col·laborat" inconscientment en la situació de maltractament.

Guanarteme

El caso de Christian G y de Ricardo Fernando son exponentes de que todavía queda mucho por hacer en cuanto a la violencia de género. Entonces no basta con una acusación suya para que te manden una noche al calabozo ¿No? Pues es lo que berrean muchos neomachistas, la violencia de género es un problema tan serio, grave y enraizado en la sociedad que está más que justificado el que se hagan unas leyes específicas para combatirlo, los victimismos baratos de "me acusan porque soy hombre" no aportan nada y están de más.
Tampoco estaría mal quitar de la televisión todos los realities de garrulos posesivos con chonis mononeuronales que los justifican y que tienen un efecto perverso como modelo para los adolescentes y habría que ahondar en campañas de que las parejas no son posesiones ni somos quienes para decirles como se tienen que comportar, pero claro, aquí llegamos al argumento favorito de los neomachistas "es que es lo que hay", pues claro que es "lo que hay", canelo, ahora toca cambiarlo.