Tras siete años de trabajos ayer se hizo público el informe Chilcot de 12 volúmenes que estudiaba el papel jugado por Gran Bretaña en la invasión de Irak en el año 2003. El informe es concluyente y demoledor para Tony Blair: el Reino Unido no agotó todas las opciones pacíficas antes de sumarse a la invasión. No había justificación para la certeza de la existencia de armas de invasión masiva. Estados Unidos y Gran Bretañoa socavaron la autoridad de Naciones Unidas al presionar para forzar la accion militar.
Estaba todo muy claro desde el minuto uno. Ningún político que apoyara esa guerra entonces, del partido que sea, debería seguir activo. Deberían dimitir todos.
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Estaba todo muy claro desde el minuto uno. Ningún político que apoyara esa guerra entonces, del partido que sea, debería seguir activo. Deberían dimitir todos.
Menudo trío de psicópatas.