Barbara Weldens, una prometedora cantante francesa de 35 años, falleció el miércoles por la noche tras colapsar durante un concierto. La causa de su muerte se desconoce hasta el momento, y el caso está siendo investigado, aunque medios franceses apuntan a que pudo morir electrocutada. Weldens estaba en el escenario de una iglesia en el pintoresco pueblo de Goudron, en el suroeste de Francia, cuando sufrió lo que pareció ser un paro cardíaco.
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Fue una actuación electrizante, que la elevo como una estrella en el firmamento.
Los que asistieron aseguraron haberlo pasado "de muerte"