Hace 2 años | Por karakol a levante-emv.com
Publicado hace 2 años por karakol a levante-emv.com

Dos refugiadas ucranianas denunciaron anoche que una mujer intento llevárselas nada más llegar a València haciéndose pasar por una voluntaria de Cruz Roja. Así lo comunicaron a la traductora de la oenegé después de recibir la primera acogida en la estación. Rápidamente este hecho se ha puesto en conocimiento de la Policía, que aseguró que vigilará de ahora en adelante las llegadas de trenes para evitar la proliferación de mafias.

Comentarios

a

Hay gente que merece ser enviada a Marte sin billete de vuelta.

manbobi

#1 Algunas personas merecen una eutanasia terapéutica.

lainDev

#0 Muro de pago

karakol

#2 Yo lo veo perfectamente y no estoy suscrito.

axíes

#3 Pues ya me dirás qué es esto. Quizá el mensaje dependa de la ubicacioón??

pacote

#2 #3 #5 Es muro de pago, pero se puede leer abriéndolo con Firefox y pulsando F9 (cambiar a vista de lectura). Y con esto adiós muro de pago para levante-emv.

lainDev

#3 A mí me sale así

oso_69

#6 En Edge admite el modo envolvente.

A

Yo no puedo

ArdiIIa

No me gustan los muros de pago....
Solamente he pulsado CRTL-U y ...
Y naturalmente, otra opción mas es deshabilitar Javascript y refrescar la página.
Obviamente depende del interés que tenga uno en leer un medio de esas características o en recibir una determinada información

Dos refugiadas ucranianas denunciaron anoche que una mujer intento llevárselas nada más llegar a València haciéndose pasar por una voluntaria de Cruz Roja. Así lo comunicaron a la traductora de la oenegé después de recibir la primera acogida en la estación. Rápidamente este hecho se ha puesto en conocimiento de la Policía, que aseguró que vigilará de ahora en adelante las llegadas de trenes para evitar la proliferación de mafias. El incidente sucedió durante la recepción de 90 ucranianos que llegaron a la estación Joaquín Sorolla de València, en un tren desde Barcelona que a su vez llegaba desde París. Estos viajes no están fletados por ninguna entidad, sino que son los propios ucranianos los que deciden llegar así a territorio español, con el añadido de que Adif ha puesto los billetes gratis para los desplazados. Esta entidad también es la que informa a las autonomías de las llegadas de ucranianos para que preparen la acogida. Se trata del quinto tren que llega desde el sábado, todos con una media de entre 60 y 90 personas. Pese a todo, Cruz Roja aseguró que es la primera vez que ocurre algo así en València. Según alertaron las propias refugiadas, la supuesta timadora pretendía llevárselas de la estación en un vehículo, pero al ver que no lo conseguía decidió irse. No es la primera vez que les ocurre a ellas. Según denunciaron, ya intentaron llevárselas una vez en la frontera, también haciéndose pasar por Cruz Roja, con lo que en este segundo intento tenían más experiencia tratando con mafias y se pudieron zafar rápido. Oxígeno para las mafias La concejala de Cooperación y Migración, Maite Ibáñez, que estuvo presente en el dispositivo de acogida para coordinarlo, volvió a reclamar a los ciudadanos y pidió intenten ayudar a los afectados por este conflicto a través de los cauces y no acudan a por personas a la frontera por su cuenta y riesgo. Denunció, al igual que también lo hizo la consellera y vicepresidenta de la Generalitat Mónica Oltra, que el hecho de que tantas personas decidan ir con vehículos privados a la frontera puede dar pie a la proliferación de estas mafias debido al descontrol que existe en las entradas y salidas que escapan a los cauces oficiales. Pese a este incidente que al final quedó en nada, la acogida de las 90 personas que llegaron a la estación fue muy rápida y eficiente. Aproximadamente la mitad tenían familias valencianas y redes de apoyo que les esperaban para acogerles en sus casas y en dos minutos salieron de la estación. La otra mitad no tenía red. Primero se les dio un poco de comida y agua, se les registró y chequeó para determinar su perfil y el recurso que necesitan. Luego una traductora les proporcionó información sobre las fallas y por qué iban a escuchar pequeñas explosiones en forma de petardo, y se les dio una guía del Ministerio de Inclusión para personas ucranianas. En poco menos de 45 minutos se había hecho todo esto y los refugiados estaban subidos a un autobús camino de un hotel donde han pasado la noche bajo techo y en una cama caliente.