Daniel Redondo es ganadero en Polvoredo, en el valle de Valdeburón. Allí los lobos llevan unos días cebándose con el ganado y tras varios ataques seguidos los ganaderos también enseñan los dientes porque sienten que la ofensiva que sufren es doble: el cánido y la ley
Comentarios
Pobres ganaduros que no controlan sus cabañas. Que hartazgo de gente!!
#1 Al monte te mandaba. En una semana se te bajan los humos.
#2 en el monte vivo. Y no fumo.