En la demanda de conciliación presentada en su día, el abogado de la madre pedía que el obispo reconociera que en un desayuno informativo hizo declaraciones relativas a la actuación de la madre, que considera que "atentan contra el honor de mi representada", al ser "ofensivas a su dignidad, imagen pública y buen nombre como madre de la menor", instando a que se retractase de las mismas, a través de una nota de prensa, manifestando expresamente que "no se atienen a la realidad".
Comentarios
Interesante precedente el de esta madre. Es evidente que algunos miembros de la iglesia expresan opiniones antidemocraticas, anticonstitucionales, que van en contra de los derechos humanos e incluso que incitan al odio etnico.
¡Bien por esta mujer, esta es la via para combatir a estas personas!
Bien!
Las otras veces que ha habido denuncias por insultos, algunos mucho más graves, se han archivado. La Iglesia Católica tiene un enorme poder y los obispos lo saben.
De todas formas hace bien en intentarlo, quienes no cambiarán esta Iglesia serán los católicos de base.
Que pague este bocazas. De su cartera o del cepillo que pasa en misa, me da igual, pero que pague. Ahí es donde les duele más, a estos de la secta cristiana.
Siempre se han salido con la suya, corrompen todo lo que tocan, y no se miran a si mismos porque no pueden.
¿No decían que las críticas necesariamente ofenden, y por tanto no deben legislarse? ¿O solo aplica a algunos?
#4 ¿Críticas? Que leve has sido...Y te recuerdo que el obispo se ha referido a una niña y que su opinión contribuye a la transfobia, el odio y la exclusión social.