Hace 8 años | Por Gilberta a fundacionaquae.org
Publicado hace 8 años por Gilberta a fundacionaquae.org

El calentamiento global y el uso intenso de riego para cultivos han convertido el menguante Lago Chad en una red de cientos de islas; una guarida perfecta para Boko Haram. Del lago, que baña las porosas fronteras de cuatro países (Camerún, Nigeria, Níger y Chad) dependen más de 60 millones de personas. Pero el milagro se muere. El desastre ecológico del lago Chad es la mejor noticia para los fundamentalistas.