Hace 9 años | Por --469757-- a vilaweb.cat
Publicado hace 9 años por --469757-- a vilaweb.cat

Se podrían decir, urgentemente y desgraciadamente, demasiadas cosas de todo lo sucedido entre el 15 de mayo y el 19 de junio de 2011 y la guinda triste en formato sentencia conocida ayer. Pero probamos, aunque sea ya toda prisa, de hacerlo globalmente, en ética sintética, con todo el telón de fondo y como larga reflexión que nos interpela a todas y todos.TRADUCCIÓN: #1

Comentarios

D

TRADUCCIÓN

1. mandará

La sentencia emitida ayer por el Tribunal Supremo convenientemente filtrada a los medios antes de que los implicados- es penalmente excepcional, procesalmente anómala, repressivament enloquecida y nítidamente política y politizada. A palmos: grave excepcionalidad penal porque bajo el paraguas del tribunal de excepción que es la Audiencia Nacional ampara en una pseudofigura jurídica (intimidación ambiental ') por el que no se debería condenar sólo 8 personas, sino sencillamente todos los presentes; y el derecho penal está para individualizar conductas punibles, no para causas generales. Al por mayor, al tumtum y 8 cabezas de turco. Podían haber sido cualesquiera otros 8. Procesalmente anómala porque el TS excede sus funciones lejos de la doctrina europea -todo el mundo pensaba que ordenaría la repetición del juicio y no una condena sin derecho de defensa por los acusados en la instancia judicial superior- y porque, como es sabido, el ponente inicial fue removido y apartado a fin de lograr la condena deseada: el voto particular es, en este sentido, severo. Escamas que los tipos penales aplicados no son atribuibles a los hechos concretos individualizados. Y dice más: 'el objeto de esta causa tiene connotaciones políticas tan intensas que difícilmente podría darse una aproximación de derecho que no comporte o traduzca una previa toma de posesión del intérprete en ese otro plano'. Repressivament enloquecida porque condena 8 jóvenes 1095 días de prisión, en un preludio incierto, alfombra roja extendida y mal augurio, del que ya pregona la liberticida Ley Mordaza. Y políticamente politizada porque responde más a razones de estado, a voluntades de venganza y criminalización, que no a hacer justicia. En cualquiera de las variantes, una chapuza jurídico de impulso político inquisitorial: derecho penal del enemigo (juzgar a la gente por lo que es y no tanto) contra ese otro derecho tan frecuente hacia el derecho penal del amigo : privilegios, amnistías e indultos. El famoso doble rasero.

2. DE TODOS LOS HECHOS Y LOS CONTEXTOS

Entre el 15 de mayo y el 19 de junio, ciertamente, se sucedieron muchos (tal vez demasiado) eventos en nuestro país. Hechos esperanzadores y también episodios graves y excepcionales que no se pueden reducir, como pretende torpemente una desdicha de Manzanilla Party de pensamiento único instalado en medios públicos y privados, a uno solo hiperbolitzat. Ya se sabe: versión oficial, versión de oficiales. Todos los hechos merecen análisis serio, (auto) crítica severa y reflexión serena, faltaría más. Y aprendizaje continuado en el equilibrio básico entre derechos fundamentales, respetos mínimos, crisis socioeconómica, formas de disenso y profundización democrática. Hechos de ese mes intenso: el estallido de la indignación, la ceguera política, el violento e impune desalojo de plaza Catalunya, la alta tensión y crispación en torno a un Parlamento que nunca vio parada su actividad, para aprobar las peores recortes desde el final de la dictadura y que no constaban en ningún programa electoral. Lo dijo Duran en Esade: 'si cuento el programa, pierdo las elecciones'. Democracy low cost: baja intensidad y pésima calidad. El 19 de junio, habrá que recordarlo, contra las tesis amplificadas de todos los poderes y todos los medios, 300.000 personas tomaron la calle. Para quien quiera marear la perdiz y sin banalizar ni minimizar nada de lo sucedido: durante una protesta que era fundamentalmente simbólica y desde una sentencia que no recoge ningún acto de violencia física contra ningún diputado. Ninguno. Los únicos que en ese mes visitaron hospitales, fueron trasladados en ambulancia y atendidos de golpes, hematomas y policontusiones fueron 120 indignados. Si los agredidos son otros, nada pasa. Sintomático.

3. DE palos

Uno de los hechos que deliberadamente han pasado más desapercibidos en el relato construido a medida por el Poder es el dispositivo policial urdimbre -sí, ordit- por el entonces consejero de Interior Felip Puig. Ayer un periodista me lo recordaba: de viva voz, el consejero le reconocía entonces que -rere las críticas unánimes al desalojo de plaza Catalunya sin orden judicial- lo diseñó para que los diputados supieran de qué iba todo. Ese dispositivo, en el argot, es un tiempo muerto policial: planificado, organizado, calcular. Diseñar una estrategia para que pase lo que quieras que pase: tachar todo un movimiento indignado eminentemente pacífico y desobediente con la categoría de 'violento', el anatema del momento. Santa Hemeroteca porque la memoria siempre salva: por aquellas fechas, Felip Puig sostenía que había que 'reinstalar el miedo al sistema' y 'ir más allá de la ley'. Sus comisarios decían que zurrar incluso Ghandi (Sergi Pla, en activo) o que los perseguirían 'como ratas de alcantarilla' (David Piqué en el transcurso del día de las escuadras, fuertemente ovacionado, y que es autor -mira por on de una tesina universitaria que habla precisamente, de tiempos muertos policiales y de cómo denigrar movimientos de protesta). Y -hay recuérdalo? - Del orden político-policial del desalojo de plaza Cataluña era categórica, diáfana y salvaje: 'O generamos pánico o no los sacamos de aquí'. Grândola Vila Morena, resistiendo pacíficamente, recibiendo golpes por todas partes, nunca los echaron. Tanto aprendieron la lección algunos mandos que, desde entonces, algunos aspectos de los modelos antidisturbios de intervención han cambiado sustancialmente. Ese era el contexto y abstraerse hoy de todos los elementos es un ejercicio de falseamiento y mixtificación de una realidad vivida que, ojalá, no hubiéramos vivido nunca. Pero ocurrió. Y toca aprender para evitar su repetición. La sentencia en dirección absolutamente opuesta. Y no valen excusas: cuando se va a la Audiencia Nacional con tipos penales excepcionales se sabe perfectamente qué sentencia se busca. Y qué castigo ejemplarizante se busca. Martin Fierro: la justicia es un puñal, no ofende nunca a quien lo coge. Un cuchillo que nunca hiere a quien lo clava.

4. DE cinismo lacerantes

Por ello, finalmente, todo ello reviste de una pésima y dolorosa carga cínica e hipócrita en el ejercicio del Poder. ¿Qué hace la Generalitat y el Parlamento de la manija de la extrema derecha que es la misma que los denuncia por 9N? ¿Qué hace la Generalitat y el Parlamento recurriendo a tribunales de excepción con tipos penales extraordinarios cuando la justicia ordinaria tiene instrumentos suficientes para enjuiciar, reprobar y condenar hechos punibles? ¿Por qué el Parlamento persigue ocho indignados y nunca se ha presentado como acusación contra el agujero económico reciente más grande de nuestra historia: 15.000 millones de euros dejados por los gestores de CatalunyaCaixa que campan impunemente? ¿Por qué opta por la vía represiva y autoritaria y no busca mecanismos de gestión y resolución alternativas del conflicto? ¿Por qué elige la vieja política, antigua y caduca, de ir a palos con la zanahoria? ¿Por qué los grupos parlamentarios implicados directamente -CiU, PSC, PP, C's- envían a la cárcel 1.095 días 8 jóvenes? ¿Por qué -perdonad emplear este término- este onanismo autista autorreferencial y hacia -hacia ni una- solidaridad institucional u oficial con los 120 heridos en plaza Catalunya? ¿Qué mensaje han recibido todos los golpeados? La reconsagrada impunidad. Ni una sola palabra solidaria hacia aquellos ciudadanos agredidos el 27 de mayo: mirar para otro lado. Ni una sola iniciativa para evitar la impunidad con que se han saldado todas las agresiones menos una: encubrimiento cómplice y justificación de la violencia institucional. Ni una sola autocrítica: ninguna parte. Ninguna nada en ninguna parte: el mensaje del poder. Esto no merece reflexión? El debate sobre las violencias -no sobre una única violencia- es imprescindible, pero algunos -cegament o cegando con balas de goma- sólo parecen ver una, porque nunca hablan de todas las demás. Larga hipocresía, porque la lista es interminable, tristemente: de la inmobiliaria en la racista, del estructural en la machista. El resto es la vieja tonada clasista de siempre, la insoportable letanía de la impunidad: castigo a los de abajo, exoneración a los de arriba. Las sardinas culpables y los tiburones inocentes. De vergüenza. Por eso la manifestación que el sábado recorrerá el centro de Barcelona contra la sentencia, que algunos elevan a acto de fe 'que no se puede cuestionar o criticar, bajo la fatua estigmatizadora ser' violento '. McCarthisme casero.

5. DE VIOLENCIAS negada y SILENCIADAS

Todo ello, espejo-país, merecería una reflexión sosegada, larga y profunda sobre qué modelo de país construimos, en la larga lucha que nos libre de toda violencia. Y desde esta retrospectiva hay un viejo aforismo de Josep Maria Terricabras. Del lejano 2004:

'Las violencias diarias -grandes y pequeñas- son sobre todo el reflejo de una gran violencia social. Quien no lo vea es que es miope. La represión policial y legal contribuyen a consolidar la violencia, porque no fundamentan un modelo social de convivencia sino de control y confrontación '.

gandhi

#1 ¡que me llamo Gandhi, no Ghandi!

gassganso

#1 ¿"Manzanilla Party"? Me ha arrancado una sonrisa.
Gracias por la traducción.

c

El eterno problema del derecho hispanistaní. Que si doctrina Botín, que si doctrina Parot... y ahora la donctrina Parlament.

Todo es siempre muy excepcional.