Hace 1 año | Por --726381-- a eldiario.es
Publicado hace 1 año por --726381-- a eldiario.es

La política es un deporte que exige un fuerte contacto físico. No es para los pusilánimes ni los débiles de corazón. A veces esa confrontación adquiere niveles implacables sin necesidad de penetrar en los límites del Código Penal. O quedándose muy cerca de ellos. A nada que el oponente da muestras de debilidad, algunos empiezan a notar el sabor de la sangre en la boca. Y les excita. Isabel Díaz Ayuso se levantó el jueves con ganas de matar. Habrá quien piense que era un día normal para ella.