Los principales periódicos y emisoras representan, defienden y proyectan los intereses de las poderosas élites estatales y corporativas. Los medios de comunicación estatales y corporativos no lo harán ni pueden, emprender un escrutinio público consistente y confiable de estas élites. Eso no tendría sentido ya que los medios de comunicación son la operación de propaganda del poder estatal-corporativo.
Comentarios
En otras palabras, la megafonía del régimen. Lo terrible es que funciona.
#1. Y si te rebelas estás contra la 'libertad de prensa'...