En balsas que bordean la costa del Océano Pacífico, a pie por brechas entre cerros, en caminatas que a veces superan 100 kilómetros o escondidos en camiones de carga, en taxis o autobuses de pasajeros. Es así como, desde hace varios meses, se mueven miles de migrantes centroamericanos que entran a México sin documentos legales. Son quienes solían utilizar el tren carguero conocido como La Bestia, que debieron abandonar ante el endurecimiento de la vigilancia que aplica el gobierno mexicano en los estados de la frontera sur.
Comentarios
Nunca entendere a esas madres hondureñas que consienten que sus hijos e hijas menores de edad partan a tan dificil viaje.Ellas fomentan la marcha aun conociendo las penurias que van a sufrir.Si el niño o adolescente llega a su destino mandará dinero fresco a su familia que no se mueren de hambre sino de zanganear y beber.
Jamas he conocido una sociedad como la hondureña.Tan barbaros, machistas, homofogos y ellas tan tontas.Las ves todas hipersexualuzadas y a su manera tambien machistas porque dependen del amante de turno, los hijos a veces les molesta y los mandan a la ruta.Yo he hablado con algunas y aqui en España las mandan jovencitas para ver si algun incauto de 80 años entran por el aro y a dar el calzonazo en este caso.
Te lo cuentan con una pasmosidad que se te ponen los pelos de punta y si preguntas que si no es asqueroso y repugnante van y te sueltan que nanay.Luego van a rezar a su culto evangelico.Chillan, lloran, hacen la croqueta ven a su Dios y ya está.Dios lo perdona todo.Si algun hijo muere o es asesinado en el trayecto...es Dios que asi lo ha querido.
No he visto una sociedad mas enferma que la hondureña y ciudadanos de los que fiarme nada que ellos y ellas.Se traen bien aprendida la lección desde el pizo inmundo que es ese pais.