Plantear el derecho de rectificación de una forma autorregulatoria —cuando ya existe una ley que prevé que sea un juez quien decida si procede o no rectificar un contenido— o establecer una agencia estatal que pueda multar contenido homófobos son dos ejemplos de reformas normativas que pueden poner en peligro, de nuevo, la libertad de expresión.
Comentarios
¿Va a ser obligatorio acudir y aplaudir al paso de la cabalgata del día del orgullo gay?