Allí donde miremos siempre habrá algún eslogan animándonos a creer que no hay nada imposible, algún coach invitándonos a «ser nosotros mismos» o alguna influencer afanada en hacernos creer que debemos aceptarnos «tal y como somos». No les hagan caso. Con respecto a la primera frase, en la que no deja de vislumbrarse la inquietante confianza en el triunfo de la voluntad que todo lo puede, no hará falta invertir ni una sola línea para enumerar el conjunto (este sí potencialmente infinito) de cosas que son humanamente imposibles.
Comentarios
El triunfo de la voluntad, gran película: https://www.documaniatv.com/historia/el-triunfo-de-la-voluntad-video_d022db9af.html
#1 Iba a comentar lo mismo.
Como me dijo uno de mis mejores colegas de adolescencia, cuando teníamos él 18 y yo 16 años: "siempre tienes que ser tú mismo, sin importarte lo que digan los demás. Menos si eres un puto gilipollas, entonces haz caso de la gente y sé cualquier otra cosa menos tú mismo".
No te aceptes tal y como eres, disóciate. En fin...
#2 La idea es que no hay ninguna necesidad de aceptarnos y mucho menos de "ser nosotros mismos", porque en el fondo solo son arquetipos.
El superpoblado mundo de los coachs, nutrido de gente cuyo currículo en el mejor de los casos es haber tenido un curro bueno, haberlo perdido, y emprender una nueva carrera profesional bajo la premisa de que los consejos que les llevaron a ellos a las colas del paro, llevarán a otros al triunfo.
Siempre me ha repateado la gente a la que le expones alguna parte de sí mismo y contestan como excusa: ¡Es que yo soy así!
Como aquel al que suspendieron en su examen de acceso a bellas artes y cuando estaba to rabioso diciéndole a un compañero de estudios "esto es injusto, estoy por liarla", este último le aconsejó: "se tu mismo"
E invadió Polonia
No me acepto tal y como soy siempre y cuando pueda hacer mejoras, por la personalidad y no por vanidad.