Hace 9 años | Por arcadiobuen a democracynow.org
Publicado hace 9 años por arcadiobuen a democracynow.org

“¿Qué deseas lograr con esta protesta?”, le pregunté en agosto del año pasado a una adolescente de 13 años que estaba participando de una manifestación en Staten Island contra el asesinato por parte de la policía del afroestadounidense Eric Garner. La adolescente, llamada Aniya, me respondió: “Vivir hasta los 18 años sin morir antes de un balazo. Queremos crecer, vivir la vida. No queremos morir en cuestión de segundos por culpa de la policía”.

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Hacerse un Michael Jackson ayuda a despistar

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Veia el otro día "La Leyenda del Indomable" de Paul Newman. Estrenada en 1967 relata la vida de un preso que debe hacerse fuerte en una prisión con delincuentes que han cometido delitos muy graves, desde asesinatos a robos con fuerza. El Director, Stuart Rosenberg, lógicamente quiso retratar como era la vida en prisión. Escenas 'duras' para aquella época. Pues bien, no había negros. Alguno se veía, pero vamos.

Ha cambiado muchos las cosas. Ahora lo que no se vería es un blanco. Pero sí muchos negros e hispanos. ¿Alguien se creería una película en una cárcel americana en que los presos no fueran negros? Pues Rosenberg tampoco creyó en 1967 que alguien le tomara en serio si empezaba a sacar negros en su película.

Es el nuevo apartheid. Se escuda en la democracia, pero no les dejan votar muchas veces con triquiñuelas, no les dan acceso a una buena educación, y los condenan a la pobreza y violencia. Dejan de lado a un grueso importante de la población que luego encima les va a intentar robar para comer. Y toda esa materia gris es de desaprovechada, y aprovechada por los asiáticos, que llenan ahora los laboratorios y universidades. Pero es gente de fuera. Estados Unidos se va a encontrar con un grave problema en 20 o 30 años... Posiblemente acabe con su poderío.