Publicado hace 2 años por Chabelitaenanita a restauraciondeecosistemas.com

En buena medida el olivar ha crecido sobre dehesas, que a su vez crecieron sobre el antiguo monte mediterráneo. No es raro por ello ver la asociación de la encina con el olivar. Las aromáticas casan bien con el descendiente del acebuche, el olivo, y su plantación entre hileras de olivos en cierto sentido supone un regreso a ese monte mediterráneo originario.