Fiebres altas, intenso dolor de cabeza, tos irritativa, enrojecimiento de la faringe, dolores musculares y sed intensa. De este modo se describían los síntomas de la gripe asiática que en octubre de 1957 azotó España con toda su virulencia y que causó, en algo menos de tres años, 1,1 millones de muertos en todo el planeta.
Comentarios
Por lo que parece, la China se da mucha maña en estos asuntillos.
O eso nos quieren hacer pensar.