Ha surgido una serie de demandas de un sistema de atención médica donde la lucha para combatir la pandemia ha llevado al descuido de otras afecciones graves.
#1:
El pasado mes de marzo, mientras el coronavirus azotaba España, Lídia Bayona Gómez empezó a sufrir ataques de vómitos y tos.
Un hogar de ancianos trabajador, que trataba a sí misma como un posible caso Covid-19, aislamiento y conseguir a sí misma prueba. Los resultados fueron negativos, dos veces. Con su peso bajando y su orina volviéndose roja, hizo repetidos intentos de ver a un médico y, a fines de abril, en una consulta telefónica, uno le dijo que se quedara en casa y le recetaron medicamentos para la gastroenteritis y una infección del tracto urinario.
Pero el dolor siguió empeorando y, a fines de junio, su hermana la llevó a una unidad de emergencia del hospital. A mediados de julio, se sometió a una cirugía de 12 horas para extirpar dos tumores cancerosos, uno de un ovario y otro de las vías biliares. Murió en el hospital nueve días después, a los 53 años.
No fue una tragedia aislada.
Los hospitales y otros centros de atención médica se han visto obligados a dedicar la mayor parte de sus recursos a los pacientes con Covid-19, y los médicos advierten que un número creciente de casos de cáncer y otras enfermedades graves no se detectan, lo que podría terminar costando muchas más vidas. Ese peaje está comenzando a reflejarse en juicios.
#2:
Que trágico es todo. La sanidad pública debería de ser el pilar sobre el que se sustente cualquier país
#7 totalmente de acuerdo. La sanidad como las pensiones jamás debería de ser un negocio es un derecho básico del ser humanos y la piedra angular sobre la que construir una sociedad justa
La sanidad puede ser perfectamente de acceso universal, ser de calidad y ser de gestión privada. No, USA no es un modelo a seguir.
Las pensiones son un sistema estructuralmente insostenible en el tiempo tal y como está montado y fue diseñado básicamente como un super impuesto y una toma de rehenes para uso político.
Los recortes en sanidad de los que tanto habláis no han sido tales. Se recortó algo en 2011 pero muy poco, mirad los presupuestos generales del estado.
La sanidad española siempre ha sido una bazofia con colas de espera interminables y numerosas negligencias que han costado muchas vidas.
Los hospitales son instituciones del siglo XIX que, debido al monopolio estatista, no han podido desarrollarse.
La crisis del covid probablemente matará a más personas por este tipo de cosas (la de la noticia) que por el propio virus, y esto no es culpa del gobierno, es culpa de la mala gestión y organización sanitaria. Gestores sanitarios, médicos, personal y burócratas orbitantes, que no dan pie con bola y se hacen la picha un lío cuando los sacas de su zona de confort burocrático.
Te recuerdo que fueron los propios médicos los que, al inicio de la pandemia, no hicieron ni el más mínimo atisbo de pedir aprovisionamiento de epis y mascarillas, porque según ellos todo estaba controlado.
El pasado mes de marzo, mientras el coronavirus azotaba España, Lídia Bayona Gómez empezó a sufrir ataques de vómitos y tos.
Un hogar de ancianos trabajador, que trataba a sí misma como un posible caso Covid-19, aislamiento y conseguir a sí misma prueba. Los resultados fueron negativos, dos veces. Con su peso bajando y su orina volviéndose roja, hizo repetidos intentos de ver a un médico y, a fines de abril, en una consulta telefónica, uno le dijo que se quedara en casa y le recetaron medicamentos para la gastroenteritis y una infección del tracto urinario.
Pero el dolor siguió empeorando y, a fines de junio, su hermana la llevó a una unidad de emergencia del hospital. A mediados de julio, se sometió a una cirugía de 12 horas para extirpar dos tumores cancerosos, uno de un ovario y otro de las vías biliares. Murió en el hospital nueve días después, a los 53 años.
No fue una tragedia aislada.
Los hospitales y otros centros de atención médica se han visto obligados a dedicar la mayor parte de sus recursos a los pacientes con Covid-19, y los médicos advierten que un número creciente de casos de cáncer y otras enfermedades graves no se detectan, lo que podría terminar costando muchas más vidas. Ese peaje está comenzando a reflejarse en juicios.
Yo llevo meses con dolores y a la espera de que me atienda el médico de cabecera para que me hagan una analítica. Espero no tener nada ya que no hay justificación para dilatar las citas presenciales y solucionarlo todo con antiinflamatorios.
Nota: Si os sale el aviso "Thanks for reading The Times", se puede quitar de forma trivial borrando cookies o usando una pestaña privada (por tanto yo esto no lo considero "muro de pago").
Comentarios
Que trágico es todo. La sanidad pública debería de ser el pilar sobre el que se sustente cualquier país
#2 pues sí, pero este país se sustenta en sobres
#2 díselo a los que han estado esquilmando y maltratando año tras año la sanidad pública.
Deberían de ser condenados por alta traicion a la patria
#7 totalmente de acuerdo. La sanidad como las pensiones jamás debería de ser un negocio es un derecho básico del ser humanos y la piedra angular sobre la que construir una sociedad justa
#8 mantra tras mantra.
La sanidad puede ser perfectamente de acceso universal, ser de calidad y ser de gestión privada. No, USA no es un modelo a seguir.
Las pensiones son un sistema estructuralmente insostenible en el tiempo tal y como está montado y fue diseñado básicamente como un super impuesto y una toma de rehenes para uso político.
Los recortes en sanidad de los que tanto habláis no han sido tales. Se recortó algo en 2011 pero muy poco, mirad los presupuestos generales del estado.
La sanidad española siempre ha sido una bazofia con colas de espera interminables y numerosas negligencias que han costado muchas vidas.
Los hospitales son instituciones del siglo XIX que, debido al monopolio estatista, no han podido desarrollarse.
La crisis del covid probablemente matará a más personas por este tipo de cosas (la de la noticia) que por el propio virus, y esto no es culpa del gobierno, es culpa de la mala gestión y organización sanitaria. Gestores sanitarios, médicos, personal y burócratas orbitantes, que no dan pie con bola y se hacen la picha un lío cuando los sacas de su zona de confort burocrático.
Te recuerdo que fueron los propios médicos los que, al inicio de la pandemia, no hicieron ni el más mínimo atisbo de pedir aprovisionamiento de epis y mascarillas, porque según ellos todo estaba controlado.
El pasado mes de marzo, mientras el coronavirus azotaba España, Lídia Bayona Gómez empezó a sufrir ataques de vómitos y tos.
Un hogar de ancianos trabajador, que trataba a sí misma como un posible caso Covid-19, aislamiento y conseguir a sí misma prueba. Los resultados fueron negativos, dos veces. Con su peso bajando y su orina volviéndose roja, hizo repetidos intentos de ver a un médico y, a fines de abril, en una consulta telefónica, uno le dijo que se quedara en casa y le recetaron medicamentos para la gastroenteritis y una infección del tracto urinario.
Pero el dolor siguió empeorando y, a fines de junio, su hermana la llevó a una unidad de emergencia del hospital. A mediados de julio, se sometió a una cirugía de 12 horas para extirpar dos tumores cancerosos, uno de un ovario y otro de las vías biliares. Murió en el hospital nueve días después, a los 53 años.
No fue una tragedia aislada.
Los hospitales y otros centros de atención médica se han visto obligados a dedicar la mayor parte de sus recursos a los pacientes con Covid-19, y los médicos advierten que un número creciente de casos de cáncer y otras enfermedades graves no se detectan, lo que podría terminar costando muchas más vidas. Ese peaje está comenzando a reflejarse en juicios.
Yo llevo meses con dolores y a la espera de que me atienda el médico de cabecera para que me hagan una analítica. Espero no tener nada ya que no hay justificación para dilatar las citas presenciales y solucionarlo todo con antiinflamatorios.
#4 Una solución rápida es ir a donar sangre. Allí hacen una analítica básica para saber si sirve o no para otros pacientes.
#6 una tristeza tener q recurrir a la picaresca
Nota: Si os sale el aviso "Thanks for reading The Times", se puede quitar de forma trivial borrando cookies o usando una pestaña privada (por tanto yo esto no lo considero "muro de pago").