Manos firmes, dedos diestros y conocimientos básicos de la anatomía humana son elementos indispensables para ser masajista. En Corea del Sur van más allá: las autoridades dispusieron hace más de un siglo que solo personas invidentes podrían practicar el masaje, como una forma de garantizarles una forma de generar ingresos para su subsistencia. La polémica ley se ha impugnado cuatro veces y el Tribunal Constitucional de la nación acaba de ratificarla este martes.
|
etiquetas: ciegos , masajistas , corea del sur