Ese día llovía sobre Saladillo y a María Marta Miguens la sacaban de su casa descalza, esposada y en estado de shock. Su marido la había golpeado de una forma feroz luego de que ella regresara a su casa del hogar de tránsito en el que había estado un mes intentando huir de su pareja, al que ya había denunciado cuatro veces en la Comisaría de la Mujer por violencia doméstica. Pero ese día la detuvieron a ella, que había llamado a la Policía para que se lo llevaran a él. De aquel episodio pasó poco más de un año y ahora la jueza de paz de esa loc
|
etiquetas: golpeada , condenada , violencia , familiar