Según el escrito de acusación provisional de la Fiscalía, el acusado, de mediana edad, era director y monitor de un campamento de verano y establecía "relaciones de amistad muy estrechas con los padres de los menores", de las que se aprovechó en el caso de la víctima para quedarse solo con ella y que le permitieran incluso dormir con la menor. En esas ocasiones, el procesado incurrió presuntamente en tocamientos, por lo que la Fiscalía solicita, además de la pena de prisión, diez años de libertad vigilada al salir.
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Pocos me parecen 6 años