Hasta ahora la sentencia referencia, por la que se regía el Tribunal Constitucional, era la 258/2007, de 18 de diciembre. Esta imponía al recurrente probar de qué forma habría repercutido sobre el resultado de la sentencia condenatoria caso de haber podido hacer uso del derecho a la última palabra. El caso del holandés Jerry Aroon-Kumar Rustveld ha hecho que el Tribunal Constitucional cambie su doctrina sobre este derecho.
La parte de que el acusado declare al final, pareciendo algo insignificante me parece que puede cambiar muchas cosas. Ojo, para bien y para mal. Más de un penalista tiene dicho a su cliente que cuando le ofrezcan la última palabra, la deniegue. Porque has podido establecer una estrategia creible en la defensa de tu representado, presentar pruebas, presentar testigos... y tu propio cliente en su última palabra cargarse toda su defensa por ponerse a hablar a su aire..
Comentarios
Ah, ¿ya no la va a tener siempre mi mujer?
La parte de que el acusado declare al final, pareciendo algo insignificante me parece que puede cambiar muchas cosas. Ojo, para bien y para mal. Más de un penalista tiene dicho a su cliente que cuando le ofrezcan la última palabra, la deniegue. Porque has podido establecer una estrategia creible en la defensa de tu representado, presentar pruebas, presentar testigos... y tu propio cliente en su última palabra cargarse toda su defensa por ponerse a hablar a su aire..