Las ganas de meterse a juzgar a los demás siguen creciendo de manera imparable, y afectan cada vez a más facetas de nuestra vida. La vieja del visillo se ha convertido en una especie de institución, en un pilar de nuestra civilización.
Y ahora, como siguiente (que no última) vuelta de tuerca, nos encontramos a la policía empática, esa gente que te dice con quién tienes que empatizar, por quien tienes que compadecerte y a quien tienes que apoyar para no ser un desalmado. Porque ser víctima te da la razón y ser pobre es una condición moral que te convierte en mejor persona.
La vieja del visillo suele ser una persona mayor con simples ganas de entretener su vida porque ya no puede salir a la calle, leer y está harta de ver la tele.
Porque ser víctima te da la razón y ser pobre es una condición moral que te convierte en mejor persona.
Precisamente lo más probable es que te conviertan en peor persona. Difícil me parece que de la necesidad y el dolor brote algo positivo. Ambas condiciones envilecen pero eso es responsabilidad de quien las provoca, no de la víctima.
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Y ahora, como siguiente (que no última) vuelta de tuerca, nos encontramos a la policía empática, esa gente que te dice con quién tienes que empatizar, por quien tienes que compadecerte y a quien tienes que apoyar para no ser un desalmado. Porque ser víctima te da la razón y ser pobre es una condición moral que te convierte en mejor persona.
El problema viene de darle ese poder a la "policia"..
La vieja del visillo suele ser una persona mayor con simples ganas de entretener su vida porque ya no puede salir a la calle, leer y está harta de ver la tele.
Porque ser víctima te da la razón y ser pobre es una condición moral que te convierte en mejor persona.
Precisamente lo más probable es que te conviertan en peor persona. Difícil me parece que de la necesidad y el dolor brote algo positivo. Ambas condiciones envilecen pero eso es responsabilidad de quien las provoca, no de la víctima.