No sé qué pasará con Jordi Pujol y su esposa Marta Ferrusola así como con sus siete hijos, pero sí sé se una cosa: están bajo el ojo judicial y bajo el ojo escrutador de la Hacienda. Y este hombre salió, dio la cara y recibió en su casa la petición de comparecencia y contestó que lo haría.
Comentarios
Pobre Iñaki... Años y años de cruzada personal, y nada.
Cansina.
El Rey ya tal.
Exactamont, que le follen al amigo Iñaki por cansino y pesao de los cojones.