Los últimos meses de la vida de Berta Cáceres estuvieron llenos de signos funestos. Justo antes de la Navidad de 2015, le confió a su hermana Agustina que su vida estaba en peligro. “Los mensajes nunca se detienen, el hostigamiento nunca se detiene, me tienen bajo vigilancia. No les importa que tenga hijos. Esos hijos de puta me van a matar ". Berta participó en numerosas luchas por la tierra y el agua junto con las comunidades indígenas lencas en todo el oeste de Honduras. Pero su batalla fue abruptamente truncada.
Comentarios
#0 No te olvides señalar el idioma del artículo en el titular si no está en castellano.
Esta vez lo he hecho yo
#4 Sí, lo subí antes de que me avisases en el otro. Gracias.
Aunque tampoco lo encontré en las instrucciones que me mandaste.
Tuvo que salir «the guardian» a poner los dedos en las llagas respecto a la muerte de la activista. Eso sí, en américa la noticia se quedará en los anaqueles. Ni siquiera la OEA saldrá a balbucear algo.
Christina Rosenvinge le escribió este tema homenaje hace un par de años, "Berta multiplicada":
#2 Qué buena canción, no la conocía. Gracias por compartir.