Vaya por delante que la inmensa mayoría de los agentes son personas decentes, honradas y profesionales, y este artículo no pretende cuestionar la importante labor que realizan los miembros de las FCSE, que, no en pocas ocasiones, se enfrentan al desempeño de su labor con enormes dificultades causadas por la escasez de medios. Sin embargo, no hay mejor manera de defender esta labor, que profundizar en las causas, consecuencias y formas de evitar los fenómenos de corrupción, y para ello es necesario, sobre todo, huir del falso corporativismo.
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