Encerrarse en el feliz mundo “sin fronteras” y en el “open arms” que nos vendieron los gringos junto con su globalización, un mundo en el que los estados son sustituidos por ONG´s y la política por la manipulable ideología de los derechos humanos, equivale a practicar una caridad que hace la cama a la ultraderecha.
La izquierda está en contra de la globalización, pero a favor de abolir las fronteras y que los pueblos del mundo circulen libremente, mezclándose unos con otros, pero sin perder su identidad .
Está en contra de la religión, el machismo y las tradiciones autóctonas, pero defiende la supervivencia de los modos de vida tradicionales de otros pueblos, donde todo ello forma parte de su cultura.
Para la izquierda todo el mundo es bueno per se. Menos tus compatriotas que no son de izquierdas, que son todos unos nazis...
Este no se ha enterado de que lo que realmente la gente quiere y necesita es más inversión pública y subidas de impuestos para las políticas de género y que lleven la momia de un lado para otro. Del empleo y futuro bienestar ya si eso hablamos mañana.
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La izquierda está en contra de la globalización, pero a favor de abolir las fronteras y que los pueblos del mundo circulen libremente, mezclándose unos con otros, pero sin perder su identidad .
Está en contra de la religión, el machismo y las tradiciones autóctonas, pero defiende la supervivencia de los modos de vida tradicionales de otros pueblos, donde todo ello forma parte de su cultura.
Para la izquierda todo el mundo es bueno per se. Menos tus compatriotas que no son de izquierdas, que son todos unos nazis...
Y así una contradicción tras otra.
Este no se ha enterado de que lo que realmente la gente quiere y necesita es más inversión pública y subidas de impuestos para las políticas de género y que lleven la momia de un lado para otro. Del empleo y futuro bienestar ya si eso hablamos mañana.