Hace 9 años | Por albertiño12 a eldiario.es
Publicado hace 9 años por albertiño12 a eldiario.es

Casa mal poner trabas y aristas cortantes para evitar “el efecto llamada”, ahorrar en salvamento, y llorar después por la sangre derramada. Ellos andan distribuyendo su realidad, sus datos, sus motos, sus pactos, sus trabas, sus lágrimas de cocodrilo. Los que no traficamos con las vidas, el cuerpo o la salud de las personas –ni siquiera para embellecer los balances macroeconómicos– tenemos otra realidad.