El aprovechamiento espurio que el líder de los obispos españoles hizo de las ceremonias de Estado en torno a la conmemoración del atentado de Atocha y el funeral de Adolfo Suárez ha sido el último detonante para una reivindicación tan lógica como indebidamente postergada: la regulación laica de los actos de Estado.
Comentarios
"para una reivindicación tan lógica como indebidamente postergada: la regulación laica de los actos de Estado".
Ni es lógica ni está indebidamente postergada. Lo ilógico y lo indebidamente postergado es hacer actos de Estado tanto religiosos como laicos.
Lo lógico es hacer actos de Estado ACONFESIONALES, tal y como recoge la Constitución.
Hombre, el Rafalillo diciendo una nueva tontada, que esta vez ha llegado a Menéame. Te zurzan.