Publicado hace 8 años por viajeroWeb a encanarias.wordpress.com

Una de las mayores críticas de la ciudadanía hacia la (mal) llamada "clase política" es la responsabilidad derivada de su gestión pública, es decir: cuando en el sector privado un empleado, un "encargado" o un alto cargo lo hace mal, tiene sus efectos más pronto que tarde y él es considerado "responsable" y paga las…

Comentarios

F

El autor tiene, a mi juicio, un grave problema de percepción. Focal izar los problemas de Telde en el periodo 2003-2007 es, cuando menos, muy superficial. Telde tiene un problema estructural que arranca de la década de los 90, sólo que dicho periodo no se ha sometido a fiscalización judicial, como si lo ha sido, muy pobremente, el también nefasto cuatrienio en cuestión.

Potopo

#1 Estoy de acuerdo contigo en que decir que los problemas de Telde son de una época concreta es superficial, pero ya no tanto como para asegurar que son de la década de los 90. Yo diría que son incluso anteriores.

El caso de Telde en particular no lo conozco tan bien, pero sabiendo como son los políticos de la isla no creo que se diferencia mucho de los de Las Palmas, mismos partidos distintos nombres en la lista, pero en el fondo más o menos igual.

Todos ellos van a lo mismo, a buscar un beneficio propio ya sea para sí mismos o para el partido que representan, pero desde luego no para el ciudadano que los ha elegido. Llevan años haciendo lo mismo, gastando cuando están en el poder unas cantidades que dan miedo para hacer cosas efímeras, que queden bien en su momento y que luego caen en el olvido.

Si llevasen una buena gestión ningún partido dejaría caer en el olvido lo que ha hecho el anterior, se dedicarían a mantenerlo para que el ciudadano lo disfrutase. ¿Qué importa que un parque se levantase con un gobierno de Coalición Canaria o del PP? si después de ellos llega el PSOE y deja que durante 3 años y medio se caiga a trozos para poder empezar a remodelarlo y gastarse la millonada justo antes de las elecciones.

Eso no es gestión, es partidismo. La buena gestión debería de pasar por continuar lo que ya está empezado y no gastar inutilmente el dinero del contribuyente