Cuando se cumple un año de la entrada en prisión de los dos hijos menores de José María Ruiz-Mateos, su viuda pasa horas bajas removiendo amargos recuerdos del marido: frecuentes ataques de ira que temían la esposa y los vástagos; la humillación de estos por las broncas ante las visitas; la madre, autoexiliada en el sótano; viajes del padre sin decir adónde ni hasta cuándo; un año sin comer en la misma mesa; ni unas vacaciones juntos… y dolorosas dudas sobre su fidelidad.
Comentarios
A mi me enamoró.
#1 Siempre fuiste muy facilón.
#4 Pues de pequeño era un niño difícil.
Que te encarcelo, leche
Que Ruíz Mateos era una persona infame y mala lo sabía todo dios, ahora que no está los hijos se van a comer el marrón que iba para el padre, y la mujer muy del Opus super religiosa, pero viviendo de puta madre. Por mi se pueden ir todos al carajo, a ver si hay suerte y terminan arruinados.
No puede ser... si era un cristiano devoto...
Supongo que mientras estaba vivo y estafaba a todo el mundo, no le preocupaban esas cosas. Ahora hay que amortizar al muerto.
#2 Valga la redundancia.
Creo que terminó completamente devorado por el personaje que él mismo se creó.
En su momento fué elegido diputado europeo y era uno de los personajes más populares en España y de los que más simpatias en la gente de la calle,franquistas sociológicos analfabetos y menos analfabetos.Para esos gañanes fué un héroe.
Y Jesus Gil,otro que tal bailó y eso que al llegar a la alcaldia de Marbella hizo una declaración de intenciones,diciendo que iba a forrarse como alcalde pero que habrían migajas y casi todo el mundo pillaría algo.El que avisa no es traidor y si Ruíz Mateos fué un héroe,Gil fué un super héroe al que se le dedicaba una atención desproporcionada en los medios y un servilismo vergonzoso por parte de los periodistas.
La veneración popular y mediatica a estos sinvergüenzas.es una tragedia que dejó a los españoles a la altura del betún.