Cada año se desperdician 1.300 millones de toneladas de alimentos a lo largo de toda la cadena, entre un tercio y un cuarto de la producción mundial. Este despilfarro no sólo un problema ético, sino que conlleva graves consecuencias medioambientales. Mientras que la voluntad política para acabar con el problema es escasa, las iniciativas ciudadanas se multiplican. Yonodesperdicio es una de ellas.
Esto es otra modita tonta. Los pobres aprendimos de las madres y abuelas la cocina de las sobras: croquetas, tortillas, revueltos... Si vas justo aprendes a no tirar nada.
Comentarios
Yonofollo.
Esto es otra modita tonta. Los pobres aprendimos de las madres y abuelas la cocina de las sobras: croquetas, tortillas, revueltos... Si vas justo aprendes a no tirar nada.
A ver si tienen huevos de restar la comida que no es de hogares reales.
Y no, un restaurante o un bar NO es un hogar.