Es más que malestar; es un sentimiento de indignación el que se hace notar en aulas y departamentos universitarios donde docentes e investigadores reciben, no con sorpresa, pero sí con fundada preocupación las noticias acerca de los modos y maneras con que se van a evaluar, si nadie lo remedia, los méritos para acceder a plazas de profesorado en los distintos niveles que marcan los hitos de una carrera académica. Sería de culpable miopía no ver más que cuestiones gremiales, de las que son condenadas como querencias endogámicas...
Comentarios
La universidad española en general es muy endogámica, de todos es sabido que aunque seas el mejor, si colaboras con el departamento durante unos años, para que te conozcan, las opciones de coger una plaza son nulas o mínimas. En andalucia hay nueve universidades publicas , una por provincia y otra para meter a los que no tienen hueco en las otras ocho.
Cuando la universidad sin necesidad de un dineral en subvenciones se convierta en un elemento dinamizador social y económico de la zona donde esta implantada, habrá cumplido su función, mientras solo sirva para crear la nebulosa llamada " aportar cultura y conocimiento" y no halla en el pueblo llano la sensación de que la universidad le mejora la vida, seguirá siendo cuestionada.
... en las reivindicaciones que van tomando cuerpo en el amplio colectivo que va desde catedráticos hasta doctores recién incorporados al trabajo universitario. El asunto es de hondo calado. En la misma indignación que de forma singular sacude el ámbito de las denominadas “Letras” late en definitiva la preocupación por una universidad cuyo futuro, como el de tantas instituciones, puede verse sacrificado en el altar del mercado. Hagamos, pues, el diagnóstico de una problemática en la que se juega no sólo la supervivencia de la universidad, sino la dignidad colectiva de una sociedad democrática que no debe abandonar la aspiración a ser más culta.
Bajo mi punto de vista en España la universidad debería ser 100% gratuita pero debería haber menos plazas ofertas, tanto públicas como privadas. Por ejemplo, en Andalucía hay una pública por provincia. Y no sé hasta qué punto son necesarias tantas.