El mundo nunca sabrá exactamente que pasaba por la cabeza del vietnamita cuando tomó la, por desgracia, irreversible decisión. No solo tuvo que soportar el dolor sino también el casi seguro e inmediato arrepentimiento por haberse cortado el pene en un primer momento, sino que además continuó por tirarlo al río, garantizando practicamente que jamás podría recuperarse para llevar a cabo una cirugía reconstructiva. ¿La razón de tan estrafalario autoataque? Una gran discusión con su mujer y los posteriores (y enormes) deseos de venganza contra ella
Comentarios
#2 Pásate por aquí... así ves unas buenas etiquetas http://bit.ly/enlacesyetiquetas
#4
#5 Claaaro, me querías trolear pues pasa esto...
Yo cambiaría el "Vietnamita" del título por "Gilipollas"... me parece más relevante.
¿No hubiera sido mas fácil regalarle el best seller "casate y se sumisa"?
Ahora deberá mantener bien cortadas sus uñas!!
Esas etiquetas son microblogging #0
#1 ¿Mejor?
Después de leer esto, nasa es imposible para el ser humano.Si un tío se corta la chorra por venganza (alguien lo tenía que pagar aunque fuese él mismo) podemos colonizar el universo.
#0 me mataste con "se parte la polla"
Gilipollas no.El tío exigía venganza y alguien tenía que pagar.El ansia esa hay que quitársela.Aunque seas tú mismo sobre tí pero sobre alguien hay que vengarse.Si te toca rebanárte la chorra pues es lo que hay pero el tío no puede irse sin sufrir tu veganza.Aunque ese tío seas tú.
... Señora, fuí en su nombre a ordenarle --- ¡y me dió en la su cara una bofetada!
¡¡Ahí me las den todas!!
-(Patxing) hoy te toca bajar la basura a tí
-(ella) no! hoy te toca a tí
-(Patxing) o bajas tú o me corto la polla
-(ella) no hay huevos
¿Ves cariño? Yo también te puedo castigar sin sexo.
"O follamos todos o la puta al río". Y como la mujer era muy puta, se lanzó al río a comerse la polla cercenada.