Los casos de estos vecinos ilustran como la crisis del alquiler ha adquirido una dimensión global. Ya no es un problema de las capitales o de las rentas bajas. Afecta a los centros y las periferias, a ciudades grandes y pequeñas, a enclaves con presión turística y a los que no la tienen. A inquilinos cuyos caseros son fondos de inversión, propietarios medianos, pequeños e incluso antigua vivienda de protección. Los precios al alza de unos arrastran al resto.
Comentarios
La solucion, aunque no guste, es liberalizar el suelo (hasta cierto punto)
#1 Ya.... para conseguir exactamente qué?
#2 Subir la oferta...
Oferta y demanda y esas cosas, ya tu sabe
#1 Claro, porque tener un parque de vivienda pública social automantenida con los alquileres no es una solución.
Lo que no es es un negociete.