Se diría con todo esto que Vox es un partido contrario a las ayudas públicas. Pero, ojo, sólo de algunas. ¿Ayudas a sectores empresariales, asociaciones antiaboristas, mundo del toro o andaluces en Cataluña para luchar contra la inmersión lingüística? Eso es otra cosa. La parte estrecha del embudo es para trabajadores pobres.
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