En el mensaje se apunta directamente a la Peña ‘El Cenachero’, donde él acudía a pintar. “Los culpables están allí (…) en la Calle Granada se esconde la verdad”, avanza. El anónimo le pide a la familia que sigan esos pasos, que fijen su mirada allí porque es donde se gestó todo, que si tienen miedo contraten a un detective privado, pero que lo intenten. “Fue planeado, Antonia. Lo estaban esperando y él los conocía”, prosigue. Y menciona un nombre: Gervasio. Él tendría la clave. Sabría qué pasó, cómo ocurrió y se duda sobre si fue el culpable.
Comentarios
Interesante titular. Vuelco, dice. Como si hubiera un caso en curso que de pronto cambia radicalmente su línea de investigación. La falta de precisión también es desinformar.
Es curioso que también aparezca en una de las fotos del artículo el niño de Somosierra, otro misterio...