#1 ¿Y no te sería más práctico comprarte un arcón congelador grande? Me da que tu razón es una excusa para ir cambiando de pareja cada poco y no comprometerte.
#2 Eso del congelador es antiecológico, y además hace llorar a Marie Kondo por tu resistencia a practicar el desapego. Hasta Yoda te diría que por ese camino vas directo al lado oscuro.
"Cristina, madrileña de 32 años, cuenta que salió con el mismo tipo de personas durante mucho tiempo. “Yo era esa típica amiga que siempre sufría por las mismas razones. Llegué a salir con personas que tenían las mismas aficiones, las mismas costumbres, e incluso el mismo nombre”, cuenta Cristina, ahora casada con el chico con el que nunca soñó. “Tras tantas decepciones decidí no salir con nadie más por un tiempo. Terminé comprometida con un amigo, un tipo que era totalmente incompatible con el modelo de hombre al que yo siempre recurría. Él siempre estuvo ahí pero nunca lo supe ver, estaba muy ocupada perdiendo el tiempo”, recuerda Cristina."
Comentarios
Mis relaciones siempre acaban mal. Al final la relación se acaba pudriendo. Todos los meses igual, coge la pala y al cementerio.
#1 ¿Y no te sería más práctico comprarte un arcón congelador grande? Me da que tu razón es una excusa para ir cambiando de pareja cada poco y no comprometerte.
#2 Eso del congelador es antiecológico, y además hace llorar a Marie Kondo por tu resistencia a practicar el desapego. Hasta Yoda te diría que por ese camino vas directo al lado oscuro.
#2 Reconozco que soy un picanichos.
Es como seguir votando al PP o al PSOE durante décadas
#6 O como sentarse cada noche a mirar la tele y quejarse de que no "echan" nada interesante.
El fenómeno se llama "demasiados cubatas, poca luz en el after".
Es lo que se llama ser gilipollas,
"Cristina, madrileña de 32 años, cuenta que salió con el mismo tipo de personas durante mucho tiempo. “Yo era esa típica amiga que siempre sufría por las mismas razones. Llegué a salir con personas que tenían las mismas aficiones, las mismas costumbres, e incluso el mismo nombre”, cuenta Cristina, ahora casada con el chico con el que nunca soñó. “Tras tantas decepciones decidí no salir con nadie más por un tiempo. Terminé comprometida con un amigo, un tipo que era totalmente incompatible con el modelo de hombre al que yo siempre recurría. Él siempre estuvo ahí pero nunca lo supe ver, estaba muy ocupada perdiendo el tiempo”, recuerda Cristina."
La verdad, lo siento por su amigo.