Hace 8 años | Por --508782-- a sevillaactualidad.com
Publicado hace 8 años por --508782-- a sevillaactualidad.com

Esta historia es uno de esos ejemplos maravillosos de cómo la ciencia se construye a base de pequeños ladrillos, grandes esfuerzos de distintos investigadores que poco a poco, y con el tiempo, se van aunando para dar lugar a descubrimientos y avances maravillosos.Todo comenzó allá por el año 1955, cuando dos investigadores llamados D. Davenport y J.A.C. Nicol publicaron un estudio en la revista 'Proceedings of the Royal Society of London'. En dicho trabajo, los autores describieron la existencia de una especia de medusas - Aequorea victoria