Cubre la Península Ibérica así como de Ceuta, Melilla y todo el territorio insular de España y Portugal: Islas Baleares, Canarias, Azores y Madeira. Se trata de un mapa que integra los cartografías realizadas por el IGME y el LNEG (Portugal) y su realización se ha abordado a partir de los trabajos previos a escala 1:400.000 de las grandes unidades geológicas: Macizo Varisco, Pirineos, Cordillera Bética, Cordillera Cantábrica e Ibérica y Cuencas del Duero, Tajo y Ebro. En este nuevo mapa, se incluye además por primera vez la cartografía geológica de la plataforma continental española y portuguesa y de las islas atlánticas portuguesas, recopilando la ingente información generada en más de 30 años de investigaciones de geología marina. Este es un dato especialmente importante de cara a la ampliación de la Zona Económica Exclusiva (ZEE), ya que la prolongación de los derechos de soberanía nacional se realiza con criterios puramente geológicos.