En 2013, el físico y profesor de universidad Timothy Koeth recibió un misterioso objeto como regalo de cumpleaños. La nota que lo acompañaba decía que era una reliquia nazi. Era uno de los cubos de uranio que uno de los tres grupos de investigación nazi distintos usaban para crear un reactor nuclear experimental. La guerra terminó antes de que pudieran concluirlo. Investigaciones de físicos italianos actuales sugieren que el diseño era viable tan solo con añadir mayor concentración de estos cubos.
|
etiquetas: reliquia nazi , bomba atomica