Hace 1 año | Por MiguelDeUnamano a eldiario.es
Publicado hace 1 año por MiguelDeUnamano a eldiario.es

Ubicado sobre el revellín de Can Pelat o Casa del Rei don Jaime, construcción que desde el exterior reforzaba las murallas de Palma, un barracón de madera de reducidas dimensiones servía para desmontar cartuchos obsoletos en aras a recuperar la pólvora y otros materiales que habían servido de munición a las armas del Ejército español. Dentro del almacén, más de un centenar de trabajadores y trabajadoras, numerosos niños entre ellos, se afanaban en rescatar los componentes, principalmente plomo y latón.