Genomas del Neolítico del Este de Asia recién descubiertos han revelado una pieza perdida de la prehistoria humana, concretamente que el movimiento de la población jugó un papel profundo en la historia genética temprana de los asiáticos orientales. El ADN recientemente secuenciado pone de relieve un período importante en la historia temprana de Asia oriental: la transición de la economía de los cazadores a las economías agrícolas, informa la Academia de Ciencias de China.