Almudena Cid dibujó un corazón imaginario sobre el tapiz de los Juegos Olímpicos de Pekin. Lo besó, recogió su cinta y agradeció al público su apoyo. Era el 23 de agosto y ese gesto suponía el punto y final a más de dos décadas de una trayectoria deportiva irrepetible hasta el punto de que a día de hoy sigue siendo la única gimnasta en haber participado en cuatro finales olímpicas (Atlanta 1996, Sidney 2000, Atenas 2004 y Pekín 2008).
|
etiquetas: almudena cid , gimnasia , olimpismo , entrevista
Y el cine?
Y la moda?
Y...
El capitalismo funciona si hay alguien dispuesto a pagar.
Es muchísimo mejor vuestro mundo donde cada uno mira para si mismo y a los demás que los jodan.
El egoísmo general como forma de vida solo lleva a dos cosas, el beneficio para los mas ricos y un conflicto armado en el largo plazo.
El que quiera practicar deportes que no generan beneficios suficientes o bien se los reclaman al que se esté quedando el dinero, o bien espabilan para generar ingresos, no sé por qué otros tienen que pagarte que practiques un deporte que no genera el interés suficiente para poder mantenerte (o cuyo dinero se lo está quedando otro, en el peor de los casos).
Al fin y al cabo son las que obtienen un beneficio directo en forma de fondos para potenciar la actividad.
Si es lo primero, poco hay que hacer, el que quiera ser profesional de ese sector tendrá que serlo por amor al arte. Si es lo segundo es cosa de los deportistas plantarse para que cambie su modelo de negocio. No es cuestión de parasitar sino de ser productivo.
Deportes como el boxeo y otros de contacto han… » ver todo el comentario
Y además si cobras mucho nadie te impide ahorrar. Este discurso habitual en muchos deportistas me parece absurdo. Porque igual que hay muchos deportistas que lo han pasado mal por no saber gestionar su vida, también los hay que han hecho lo que digo y luego se han dedicado al mundo empresarial con el dinero obtenido.
No tiene sentido que otros deportistas o la sociedad paguen para que otra persona siga con su hobby que ni aporta ni crea interés.
Todo esto dicho desde una persona que practicó un deporte minoritario a nivel nacional durante muchos años y si tenía alguna beca era de la federación y lo poco que ganaba en alguna competición.
Por ejemplo, Teresa Portela estudió fisioterapia mientras seguía compitiendo al máximo nivel. Pocos deportistas habrá que entrenen tanto como un piraguista. Si se quiere, se puede.
Y en eso creo que los partidos de izquierda crean más burocracia añadiendo mil historias, excepciones, ayudas, restricciones... Y la derecha conservadora está cómoda en esa burocracia porque a las grandes empresas no les supone un esfuerzo tener equipos de gente dedicada a eso y les da una ventaja sobre los que no pueden tenerlos.
En general cotizan con un contrato laboral o a niveles más altos a través de su empresa.
De todos modos a día de hoy quien es o ha sido deportista de élite tiene facilidades para estudiar, becas e incluso ennciertas oposiciones te dan puntos como méritos.
Respecto a la cuestión que ocupa la publicación, quienes son de élite y ganan mucho dinero, pueden invertir ese dinero en hacerse autónomos, aunque el epigrafe no tenga nada que ver con el deporte, ni siquiera es necesario facturar nada. Solo se necesita pagar. Mientras pagues, cotizas, es así de sencillo.
El otro dia vi que Romay explicaba lo mismo de que no les dejaban cotizar, si hubiesen tenido mejores asesores, hubiesen encontrado la forma de hacerlo.