A finales de los 70, Isabel Steva Hernández, fotógrafa que ha pasado a la historia como Colita, y la escritora Maria Aurèlia Capmany se convirtieron en pioneras de lo que podría llamarse el feminismo sin pretensiones. Cierto es que, como las describe Francesc Polop, amigo de Colita y responsable de su archivo, ambas eran feministas «de pro y de facto». Incluso se las podía considerar «empoderadas» antes de que el concepto existiera. Pero lo que una y otra consiguieron con Antifémina, considerado como el primer libro gráfico feminista de la Tran
Comentarios
Oye es muy difícil vivir con etiquetas; eres más mujer si actuas así y menos hombre si haces no se que...
Y si cada uno hace lo que le sale de la pilila/ratu y a los demás nos da igual?
Últimamente veo señores que se maquillan y se hacen uñas fantasía y señoras que no van de falda y tacón. Están contentos? Parece que si, pues ale ya estaría no hay mucho más que decir. Y en caso de decir algo que sea "ole por ellas/ellos llegaron al nirvana del sudapollismo"
Helicoptero Apache.