Hace 2 años | Por boroscq. a elconfidencial.com
Publicado hace 2 años por boroscq. a elconfidencial.com

De tener quemaduras de tercer grado y tentar a la muerte, a convertirse en un adicto sobre la bicicleta. Así se salvó el bajista Duff McKagan del infierno de drogas y alcohol.

Comentarios

devilinside

Yo curré montando el concierto del 92 en el Calderón, y en las pruebas de sonido, mientras terminábamos de instalar cableado de iluminación, uno de nosotros soltó que el Adler parecía que tocaba la batería con la cuchara y la chuta en lugar de con las baquetas