Publicado hace 7 años por Cleóbulo a nationalgeographic.com.es

Si en lugar de paseos y parterres de césped tuviese un pavimento transparente, el Patio de la Piña de los Museos Vaticanos se convertiría en el lugar más fotografiado de Italia y del planeta entero. En vez de recorrerlo a buen paso en dirección a la Capilla Sixtina, los visitantes se detendrían a contemplar el enrevesado laberinto de pasillos que se despliega bajo sus pies: el corazón del Archivo Secreto Vaticano.

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themarquesito

Entre los «descubrimientos» más recientes de Bechetti, una orden de pago cursada por el papa Paulo III Farnesio en favor de Benvenuto Cellini, el orfebre más importante del siglo xvi, por confeccionar el molde de su sello pontificio («pro manifactura plumbi apostolici»). Una pequeña anécdota histórica que confirma que ni siquiera los grandes maestros hacían ascos a aventurarse en el arte de los sellos

No tiene nada raro que el papa haga el encargo a Cellini porque sabe que Benvenuto es el mejor en su oficio de orfebre y quiere el papa un sello de plomo de la mejor calidad, algo que Benvenuto Cellini podría hacer con la minga.

En cuanto al sello de oro de Felipe II, es éste de la imagen.
http://3.bp.blogspot.com/-BG7cQBIMpmM/U8MffTKqRZI/AAAAAAAAKHs/oQUikYJ3QGo/s1600/sello_juramento.jpg
En ese sello, Felipe todavía no era rey de las Españas y aún estaba casado con María Tudor. En la bordura del sello pone: Philippus, Dei gratia, Angliae, Franciae, Citerioris Siciliae, et Hierusalem rex