La tierra de la libertad, paradójicamente, nunca ha sido un lugar muy confortable para los que cuestionaban el sistema con algo tan peligroso y violento como la palabra. Fue el caso de Bill Hicks, monologuista que abandonó la televisión tras ser censurado y tuvo que ser acogido por el público inglés, de hecho, es más recordado hoy en Gran Bretaña que en Estados Unidos. Sin embargo, sus chistes incómodos, procaces, duros y directos fueron la antesala de la generación de monologuistas actuales
Comentarios
Empieza fuerte: "la tierra de la libertad" y "paradójicamente"..
El mejor.
Espera, espera, que ahora que el público no vaya a tus actuaciones, tiene un nuevo nombre: censura.
Los ofendiditos están desatados.
Paciencia, hermanos, que esto va para largo.
Sane man