Publicado hace 4 años por mainaberd a luissoravilla.blogspot.com

En 1881, Nietzsche estaba muy enfermo. Bien, eso no es ninguna novedad, pues Nietzsche rara vez estaba sano, pero esta vez perdía la vista por momentos. Escribió a su hermana (la antisemita). Le explicó que iba a comprarse un aparato para poder seguir escribiendo, incluso ciego. Había hablado, dijo, con el inventor de la máquina de escribir, el señor Malling-Hansen de Copenhague.

Comentarios

El_Cucaracho

Pues Reverte tiene dos bolas escritoras.