No dictaré clases allí el semestre que viene y no sé si volveré algún día a dictar clases en una licenciatura en periodismo. Me cansé de pelear contra los celulares, contra WhatsApp y Facebook. Me ganaron. Me rindo. Tiro la toalla.
Es fácil, el que quiera mirar el móvil que lo mire fuera de clase. Me huelo que la asistencia allí será obligatoria, y en mi opinión ahí está parte del problema. No se debe obligar a ir a clase para aprobar.
El profesor tenía que modernizarse. Dividir sus clases de 90 minutos en pedacitos de 20 segundos y enviarlas por Twitter, Whatsapp, o lo que sea, para que sus alumnos las entendieran.
Por lo que les mete a sus alumnos y las preguntas que les hace yo ya entiendo el porque prestan mas atencion al movil que a el.
Los chavales aprenden mas con el canal de youtube "Pero esto es otra historia" que escuchando al tio chapas que quiere obligar a sus mentes a ser como a el le gustan, en vez de empujarlas para que sean lo que mejor puedan.
Comentarios
Es fácil, el que quiera mirar el móvil que lo mire fuera de clase. Me huelo que la asistencia allí será obligatoria, y en mi opinión ahí está parte del problema. No se debe obligar a ir a clase para aprobar.
El profesor tenía que modernizarse. Dividir sus clases de 90 minutos en pedacitos de 20 segundos y enviarlas por Twitter, Whatsapp, o lo que sea, para que sus alumnos las entendieran.
#4
Y si pone un inhibidor y que se jodan?
#8 Siguen quedando los juegos
¿Es necesario que una página blanca con letras negras tenga que marcar con amarillo chillón algunas frases?. Voto negativo por este motivo.
#2 Tiquismiquis.
Al mundo de la educación tal vez... ¿pero a Spielberg? ¿Ha hecho llorar a Spielberg, acaso?
Por lo que les mete a sus alumnos y las preguntas que les hace yo ya entiendo el porque prestan mas atencion al movil que a el.
Los chavales aprenden mas con el canal de youtube "Pero esto es otra historia" que escuchando al tio chapas que quiere obligar a sus mentes a ser como a el le gustan, en vez de empujarlas para que sean lo que mejor puedan.