En 1619, Galileo Galilei fue el primero en bautizar un fenómeno de una increíble e inquietante belleza. A esos vivos colores que iluminaban la noche los bautizó como “aurora boreal”, en una mezcla entre Aurora, la diosa griega del amanecer; y Bóreas, el viento del Norte.
Comentarios
Sueñan los cazadores de auroras boreales con galgos espaciales?
Tiene que ser un espectaculo increible... aunque, por lo que dicen, se ve más en las fotos (larga exposición) que lo que se aprecia en la realidad.